Tras el seven de Christians llega una etapa de reacondicionamiento físico, y luego actividad de corrido con los torneos de Punta del Este, Viña del Mar, Pinamar, Sudamericano y Ciruito IRB en las Vegas
Tras el acondicionamiento físico que va desde esta semana hasta la última del año, Los Teros VII se prepara para una intensa actividad de verano, donde tendrá varios torneos internacionales, que terminarán en la etapa del Circuito Mundial IRB en Las Vegas.
La primera actividad de 2011 será en Maldonado, donde los celestes disputarán el Seven de Punta del Este en el Campus . Ya a la siguiente semana tendrán que viajar, porque el 14, 15 y 16 de enero deben defender el título del Seven de Viña del Mar, que organiza Old Mackayans y que tendrá la presencia de los mejores clubes de Chile y Argentina.
La semana siguiente, el viernes 21 y sábado 22, continuará la presencia de la selección en torneos internacionales, con el Seven del Bosque, en Pinamar, ante los principales clubes de Argentina y Los Pumas VII.
La semana del 29 y 30 servirá para descansar y acomodar al plantel para el siguiente gran objetivo: el Campeonato Sudamericano, que se disputará en Bento Goncalvez, una localidad serrana del Estadio de Río Grande do Sul, Brasil. Allí Los Teros VII defenderán el vicecampeonato sudamericano, que a su vez otorga el pasaje a la etapa 2012 del Circuito Mundial IRB en Las Vegas.
Precisamente, una semana después será el turno de viajar a Las Vegas, para enfrentarse a lo más selecto del rugby mundial, en la cuarta fecha del Circuito IRB. La última etapa que Uruguay jugó en ese Circuito fue en 2009, con el Seven de Hong Kong.
Allí culminará la actividad de la primera parte del año, pero el plan será seguir en plenos trabajos, ya que en octubre está el otro gran objetivo: la primera edición del rugby en los juegos Panamericanos, que se jugarán en Guadalajara (México), que tienen previsto disputarse entre el jueves 13 de octubre y el domingo 1° de noviembre, y que tendrán al rugby compitiendo el viernes 28 y sábado 29.
Se trata de una competencia fundamental, ya que es la entrada definitiva del rugby en el movimiento olímpico, que tendrá su corolario con la participación en los Juegos de Río de Janeiro 2016.
