En las últimas semanas, los nombres de peso se han ido bajando lentamente de la selección inglesa de cara a la próxima temporada y el futuro. El primero fue Lewis Moody tras la RWC 2011, y hace pocos días también Jhonny Wilkinson confirmó esta decisión.   

 

Sumado a esto, también se debe considerar que hoy por hoy Mike Tindall (sustituto natural a la capitanía inglesa tras el alejamiento de estos jugadores antes nombrados), no pasa por su mejor estado físico y parecer ser una incógnita de cara al Seis Naciones de 2012.  

 

Estos acontecimientos, parecen abrirle la puerta del capitanato a Nick Easter, que viene teniendo una gran temporada en su conjunto de Harlequins, que domina la Premiership y es protagonista en la Copa Europea. Según el internacional, esta posibilidad es un verdadero honor. 

 

Si bien este nuevo proceso acarreará una cantidad considerable de cambios, entre ellos el recambio generacional en el seleccionado por parte del coach Stuart Lancaster; se espera que este siga manteniendo algunos hombres de experiencia, entre los que está Easter. 

 

El internacional manifestaría que es conciente de que su rol en el seleccionado ha cambiado. De ser uno más en los procesos anteriores, ahora pasará a ser uno de los referentes del plantel. Sumando tanta juventud, Easter deberá dar el ejemplo a las promesas del rugby británico, y guiarlos por el camino del profesionalismo que tanto se espera tenga este equipo dos veces campeón del mundo. 

A su vez, complementaría planteando que si bien no es igual de joven que hace varios años, hoy día se siente más ágil y rápido que nunca, y con muchas ilusiones de encarar este nuevo desafío. Si recibiese el capitanato, lo tomará con todo el respeto que merece tal distinción. Y sino, sigue orgulloso de poder defender la camiseta de su país