El capitán Carlos Arboleya también habló al regreso a Uruguay de lo que fue el partido ante Rumania, y la eliminación del Mundial. “Fue la culminación de un año bastante largo, con muchos partidos  y mucha carga, que lamentablemente al final no pudo ser con el objetivo que buscábamos. Peo de todos modos creo  que todos estamos tranquilos porque seguro que todos dieron lo que tenían para dar. El sábado hubo un solo equipo con capacidad para ganar el partido, lo hizo muy bien, aprovechó sus pelotas, fue inteligente y nos superó”, aseguró el “Dulce”.

 

Con respecto al partido, el capitán aseguró que “en esos primeros minutos nos pasaron por arriba, y marcaron los puntos cuando debían. En el segundo tiempo llegamos a hilvanar alguna jugada, pero la diferencia era determinante”. 

 

Otro punto bajo fue la obtención en las formaciones fijas, que le pidió a los celestes tener pelotas de calidad. “Se complicó el tema del scrum, que acá había salido hasta ahí nomas, y allá pusieron gente más pesada. En el line se vio otra capacidad de ellos para la lectura. Vi algunas partes del partido y creo que estaban con otra actitud para la defensa del line y por eso se complicaron nuestras pelotas”.

 

Con respecto a todos los problemas de renuncias y conflictos, Arboleya fue claro: “Yo siempre traté de mantenerme por afuera, y dije que quien quisiera sumarse que lo hiciera. Acá no hay ningún dueño de la camiseta, hoy estamos y mañana no, y la verdad es una lástima que algunos jugadores que quizás pudieran haber estado no lo hicieran. Igual creo que hubo un equipo que trabajó firme y comprometido, y creo que muchos de estos jugadores jóvenes pueden ser la base de lo que venga más adelante”.

 

El capitán también habló sobre lo que viene en un nuevo proceso, porque ya en frebrero se disputará un nuevo Crossborder: “Esperemos que sí. Yo no sé cuando arranca, pero vamos a estar dispuestos para ir a entrenar cuando sea necesario y con quien sea que este encargado. Así que esperar a eso”.

 

Con respecto al emocionado final, con la ronda y las palabras de Lemoine, y las lágrimas de casi todos los jugadores, el capitán expresó: “Lo de Pablo fue como un cumulo de cosas que el tenia para decir adentro sobre su situación personal. Las lágrimas fueron por haber dejado todo el 100% y que no se diera, así como se da con cualquier cosa que le ponés todo. Fue un sentimiento horrible, pero ahora ya con la cabeza más fría, nos ponemos a pensar y el equipo que ganó fue el que fue mejor, y no queda más que mirar para adelante y afrontar lo que venga”.