Si bien no era algo inesperado, la gente se ilusionaba con poder ver al jugador un poco más de tiempo en los campos de juego.  Este último Lunes, Brad Thorn corroboró los rumores que planteaban que, culminada esta Copa del Mundo, le diría adiós a la práctica asidua del rugby.

La carrera del jugador fue bastante rica dentro de lo que se puede analizar. Pasó una parte de su juventud en Australia e inició su carrera jugando en la selección australiana, y ganando tres títulos con los Brisbane Broncos. Posteriormente, regresaría  a Nueva Zelanda para jugar en los Canterbury Crusaders.

Ya en el 2003, el mismo jugador sería citado por primera vez a vestir la camiseta de su país y participaría del mundial que se disputase ese año en tierras australianas. Luego de eso, no volvería ser parte de la marea negra hasta que Graham Henry le volviese a dar una oportunidad con el nuevo ciclo que este emprendía.

El final del mismo, dará lugar el próximo 23 de octubre, cuando finalice esta RWC 2011, más allá de que Thorn puede festejar el Mundial con los suyos o quedarse con las ganas.

Según palabras del segunda línea, esta despedida será algo particular. Pase lo que pase la tristeza estará presente, ya que será su último partido con la camiseta negra. Será un momento particular, y será lindo estar en el Eden Park Stadium, con todo lo que este escenario significa, el domingo, para decir adiós.

Fuente: Rugbytime.com