Aunque aún nada se ha confirmado como real, se dice que las autoridades de los principales clubes de Inglaterra, Irlanda y Francia comenzaron a analizar distintas alternativas en pos de solucionar los cortocircuitos que poseen con los distintos seleccionados.

 

Los problemas de calendario, además de las tensas relaciones entre clubes y seleccionados por la cesión de los jugadores o no para jugar los partidos internacionales, parecen haber sido la principal causa para buscar una solución. 

 

Los que más perjudicados se han visto este 2011, sobre todo por la RWC, fueron los clubes de la Premiership y el Top 14, que debieron comenzar la acción de sus torneos sin muchas de las figuras en los respectivos equipos. Sumándose estos más tarde en el tiempo, una vez finalizado el torneo internacional.  

 

Además, las relaciones con la IRB y los clubes han sido bastante tensas en estos tiempos. Sin la intención de ceder a sus figuras cada vez que existe un test match de los seleccionados, ya más de un problema se ha generado entre las partes, y hasta el día de hoy esto sigue aconteciendo. 

 

Debido a esta serie de problemas, se han comenzado a hacer reuniones entre los clubes de las diversas Uniones del rugby europeo. Sobre todo entre los más poderosos, que son los que más jugadores de selección tienen, entre ellos Leinster, Munster, Toulouse, Toulón y Leicester.  

 

Algunas de las posibles soluciones planteadas, consisten en que el campeonato europeo deje de jugarse de agosto/septiembre a mayo/junio, y se haga de marzo a noviembre, todo dentro de un mismo año.  

 

Esta iniciativa parece haber sido aprobada por la mayoría de clubes consultados, ya que esto permitiría tanto a Hemisferio Norte y Sur que los torneos se desarrollen en el mismo período de tiempo. A su vez, Test Matches de seleccionados solamente se jugarían entre diciembre y marzo. 

 

Se propuso a su vez ampliar la cantidad de equipos a involucrar en la Copa Europea e incluso se comenzó a analizar la posibilidad de, cada cuatro años  y ajustando las cuestiones económicas, realizar una especie de mundial de clubes con doce equipos participantes, seis del Hemisferio Norte y seis del Hemisferio Sur.

 

Si bien ninguna de estas propuestas es aún un proyecto concreto de cara al futuro, se debe tener en especial consideración estas reuniones realizadas entre las partes; ya que si se llega a un acuerdo, el régimen de competencia a nivel mundial podría cambiar.