Todo quedó en un susto. James Horwill, que tuviese que abandonar la cancha antes del final de los 80 minutos en la derrota ante los irlandeses, parece ya estar bien de la molestia que lo aquejaba en ese momento.  

 

Recordemos que en aquel entonces, cuando el de amarillo abandonaba el campo de juego adolorido de un brazo en el que hae tiempo había sufrido una lesión, el staff técnico iderado por Robbie Deans temió lo peor.  

 

Una vez realizados los estudios médicos correspondientes, estos arrojaron que no había de que preocuparse. No hay lesión y lo único que generó dolor fueron los golpes típicos de los partidos en este deporte. Por lo tanto su inculsión dentro la lista para enfrentar a las águilas de EEUU es casi un hecho.    

 

Otro que nuevamente se sumó a las prácticas de los Wallabies fue Anthony Faingaa, quien por haber caído enfermo debió abandonar algunos días después la ciudad de Auckland para luego sumarse a sus compañeros.